Andrés Eloy Méndez González, miembro de la Asamblea Constituyente que opera exclusivamente según el mandato del gobierno de Nicolás Maduro, se quejó ante una patrulla del cuerpo armado acusado de cometer ejecuciones extrajudiciales
Sebastiana Barráez/ 17 de Julio de 2020
@SebastianaB
Un miembro de la Asamblea Constituyente por el Partido Socialista Unido
de Venezuela (PSUV), que además ha ejercido una variedad de cargos en el
Gobierno de Nicolás Maduro, manifestó airado porque un grupo de funcionarios de
la temible Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), un grupo elite de la Policía
Nacional Bolivariana, lo detuvo en su vehículo cuando transitaba con su
familia, por las calles de Coro, capital del estado Falcón. Andrés Eloy Méndez
González amenazó con llevar el caso a las más altas instancias de la Fuerza
Armada.
Lo relevante del hecho es que habló de acciones extrajudiciales, de
violación de derechos y de la Ley. Méndez nunca ha hecho referencia a que FAES
es señalada por gran cantidad de ejecuciones extrajudiciales, entre esas la del
hijo de un dirigente de la revolución en el estado Lara, así como un escolta de
la ministra de Asuntos Penitenciarios Iris Varela. (https://www.infobae.com/america/venezuela/2020/05/28/le-pido-a-dios-porque-ya-no-se-a-quien-pedirle-la-suplica-de-un-padre-venezolano-antes-de-enterarse-que-las-faes-asesinaron-a-su-hijo/)
Méndez González es
el presidente de la Comisión de
Economía de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), pero también fue, desde
2014 y por nueve meses, Superintendente Nacional para la Defensa de los Derechos
Socioeconómicos (Sundde),
donde se dedicó a multar e inspeccionar tiendas de ropa como EPK, de tecnología
y empresas de transporte, además de cadenas de farmacias y supermercados; fue
bajo su gestión que fueron detenidos de una cadenas de farmacias y otra de
mercados populares, a quienes señalaron de boicot.
Además, en el 2016 y por menos de un año, fue director general de la
Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), desde donde se convirtió en un gran censor de
medios, incluyendo la salida del aire de CNN en Venezuela. Inició carrera
política, como director de Secretaría del Despacho de la Gobernación de Falcón
y secretario de Gobierno, bajo la sombra de Jesús Montilla.
En un sonido que difundió asume que es un privilegiado y que si no
hubiese sido él quién sabe qué hubiese pasado.
“No me voy a callar”, dice, para referirse al FAES: “qué mal están
llevando algunos funcionarios de ese grupo de
respuesta inmediata, qué mal capitán Martínez subdirector del FAES”, de quien
dice que se lo había acabado de encontrar.
“Uno viene
saludando”, dijo ofendido, cuando los funcionarios lo obligan a estacionarse
para revisar su camioneta. Aseguró que se hiciera una cuña para enviarla a
nivel nacional “porque me parece que ya está bueno”.
Lo asombroso es
que argumenta que “los venezolanos tienen derecho, estén donde estén. Y aquí no
están suspendidas las garantías constitucionales, ni siquiera está totalmente
eliminado el derecho a tránsito, está restringido que es distinto y en todo
caso de violar cualquier norma en el medio de la restricción del Covid, ahí
está el cuerpo sancionatorio. Todo legal”.
Méndez González no
se ha enterado de que hay cientos de casos públicos, denunciados por familiares
y víctimas, de la violación de los derechos, de allanamientos sin orden, de los
asesinatos del FAES, tampoco de la tortura y asesinato del capitán de corbeta
Rafael Acosta Arévalo, en manos de funcionarios de la Dirección General de
Contrainteligencia Militar (DGCIM), de la descarada violación de la
Constitución y las leyes cuando una persona es detenida por los cuerpos de
seguridad, desparecida durante días e incluso meses sin permitírsele que tenga
la asistencia de sus abogados o comunicación con sus familiares.
En el sonido que
graba, demostrando profunda indignación, Andrés Eloy Méndez asegura que “las
cosas extrajudiciales, las cosas ilegales a mí me irritan, y no porque me las
hagan a mí, porque uno muestra el carné y entonces terminan parándose firme”.
En tono airado
reclamó que se siente distinto cuando lo para un policía de Falcón a cuando lo
hace uno venido de otro estado. “Yo les exijo a estos cuerpos de
seguridad,
hayan venido de donde
hayan venido, y lo digo como chavista, porque como chavista voy a vivir toda mi
vida, respeten a los falconianos, ya está bueno, todos tienen derecho y
dignidad”.
Se desplegó en una
explicación leguleya del carácter garantista de la Constitución. “Nuestra
constitución no es inquisitiva, se lo dio a usted señor Martínez, subdirector
del FAES en Falcón. El código de procesamiento criminal lo enterramos en el 99.
Los ocho días a órdenes de un comisario lo enterramos en el 99. Vamos con la
Constitución bolivariana que además se permitió constitucionalizar el derecho
adjetivo que es el derecho procesal del debido proceso del ciudadano”, insistió
Méndez.
Lo que no dijo es
que, en los centros de reclusión, en las cárceles y en los cuerpos de
inteligencia de Venezuela se inventaron una figura, sin sustento legal alguno,
cada vez que una persona es detenida, llamada “acostumbramiento”, consistente
en que por lo menos durante un mes al detenido se le mantiene aislado, sin
contacto con familia ni abogados, sin llamadas telefónicas, es decir
secuestrado.
Narra, entre
asombrado e indignado, como si fuera la primera que se enterara de que sucede
tal hecho, “se bajaron de las tres camionetas, con armas en mano y se fueron
contra el carro”, destacando que su esposa iba con el niño de 3 años en las
piernas “que se asustó y el otro de diez. Me identifico, pero no les importa. Pistola
en mano, armas largas en mano para encima del vehículo. ¡Qué falta de respeto!
Controle las hormonas, controle la adrenalina, señor Martínez. Controle sus
apetitos”.
Según Méndez, el
FAES “no pueden ver una familia que va por ahí, porque le brincan”. Apeló al
Gobernador del estado, al alcalde, ambos sus compañeros de partido. Prometió “hacer
un escrito sobre eso, para consignarlo al Alto Mando Militar, porque además es
militar el hombre, porque yo sé que el espíritu de Padrino López no es ese, mucho
menos el almirante Ichaso, ni siquiera de Pabón Zavarse, ni siquiera del
General Estrada que está al frente del FAES a nivel nacional, pero estos
“patiflochos” que andan sueltos con un vago conocimiento de la ley y con un
desprecio por los derechos de los demás”.
Méndez González
habló de que el FAES está violando la Ley de alcabalas y exigió la orden de un
juez o un fiscal si es un allanamiento. Dijo que funcionarios así “vienen a
hacer pasantías demoniacas”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario