La mayoría de los que quedan presos son gente muy humilde y cooperaban con la guerrilla a cambio de comida y ciertas dádivas
Sebastiana Barráez/ domingo 31 de octubre 2021
@SebastianaB
El 19 de septiembre 2020 la Fuerza Armada
Revolucionaria de Colombia (FARC) se cobró la vida de cuatro militares
venezolanos en el municipio Páez del estado Apure. “Sobre ese caso hubo: solo un guerrillero muerto y no 15
como anunció la Fuerza Armada, además no se destruyeron los tres campamentos de
Tres Esquinas, Mata de Bambú y Las Palmitas, porque los soldados fueron
emboscados antes de llegar al lugar”, revela un coronel en conversación con
Infobae.
“Ese tema con la
guerrilla ya nos ha costado varios compañeros muertos, porque después
ocurrieron los 16 muertos de marzo y abril 2021, en Páez, lo que por cierto
demuestra que jamás, en septiembre. ocurrió la destrucción de los tres
campamentos como la FANB había dicho”.
“Ahora están dejando en
libertad a los que tienen más dinero, a los poderosos, a los que sí han
mantenido contacto y relaciones con las FARC, que después se dividió en el
Décimo Frente y en la Segunda Marquetalia. Uno de esos que van a liberar es a
Álvaro Denis Santander Quintero alias Alvarito; ya habían dejado en libertad a
su mujer y a su hija. La mayoría de los que van quedando son gente muy humilde,
que no tiene dinero, muchos de ellos le servían a la guerrilla a cambio de
recibir comida y ciertas dádivas”.
El coronel recuerda que
en la Operación
Escudo Bolivariano 2020 Centauro
de los Llanos, del 19 de septiembre, que llevó a cabo el General de Brigada Robinson José Vera
Cumare, entonces comandante de la Zona Operativa de Defensa Integral 31 (ZODI)
del estado Apure, los cuatro militares asesinados fueron: primer
teniente (Av) Augusto David Linares Delgado (del GFE 20), teniente (Av) Miguel
Ángel Mora García, SM3 (Ej) Gabriel Alexander Pérez Silva (plaza del Batallón
Cedeño 921 Fuerte Yaruro) y S2 (Ej) Reiber David Chirino Reyes (del 992 BFE
José Gregorio Monagas). Heridos resultaron el francotirador Franklin Enrique
Ruiz Ramírez, C2 Fernando de Jesús Belisario y C1 Álvaro Gilberto
Gregorio.
“Ya había mucha molestia porque eso que ocurrió en septiembre 2020 y luego vino lo de marzo y abril, donde murieron el My (Ej) Edward Ramón Corobo Segovia, 1Tte (Ej) Yonathan Miguel Duarte, S/2 (Ej) Jesús Alexander Vásquez Pérez, S1 Andriel Rafael Istúriz Sojo, Tcnel (Ej) Raúl Roilander Quintero, 1Tte (Ej) Julio Manuel Inojosa Morgado, C2 (Ej) Yoendri Enrique Piñero Ortega, S1 (Ej) Breyner Alexander Granados Suarez, CN Naywill José Torres Moreno, SM2 (Ej) Wilmer De Jesús Ferrobús Garabito, SM1 (Ej) Ronal José Marcano Castillo, SM2 (Ej) Andy José Miranda, SM1 (Ej) Santiago De Jesús Reyes Farfán, S1 Álvaro Rafael Mariño Ostos, S2 Michael Miguel Medina Sequera y S1 (ARB) Luis David Lira Negrón”. (Sebastiana Sin Secretos: La derrota que amarga el Bicentenario de la Batalla de Carabobo: fingidas sonrisas versus el grito de justicia por los militares que asesinó la guerrilla)
El coronel que conversó con Infobae explica que “la operación del 19 de septiembre 2020 fue un desastre. Murieron cuatro militares y solo un guerrillero. Participaron más de 300 militares que trajeron de Caracas, Brigadas de Fuerzas Especiales, brigada de Paracaidistas, pero que no conocían la zona. A quién se le ocurre que movilizar tres centenares de militares iba a pasar desapercibido en una población como El Nula, plagada de guerrilleros del ELN, pero también con algunos ojos de las FARC”.
“Lo peor fue la logística, no utilizaron
el sistema de radio como medio de comunicación, sino que estaban confiando en
la vía celular, cuando ahí a veces funciona y casi nunca es regular, pero
insistieron que se iba a usar líneas colombianas que tiene mejor recepción,
pero ese día, no sabemos si fue intencional o casual, pero se cayó la señal
telefónica celular en Colombia y por eso se perdió la comunicación con los
soldados”.
“Por la vía La Morita – El Nula llegaron
como 20 camiones con el personal militar. Apenas estaba amaneciendo. A las 7 de
la mañana hicieron sobrevuelos aéreos en la zona. Horas después lo que
regresaron fueron heridos y muertos, en realidad dos muertos y dos heridos,
pero el helicóptero, cuyo piloto fue el My Díaz Tinedo, que debía hacer la
evacuación aérea tardó más de una hora en llegar a llevárselos y los dos
tenientes heridos, que llegaron vivos, murieron después. El único que murió en
el sitio fue el sargento segundo Reiber
David Chirino”.
“La ambulancia no tenía ni una pastilla
para el dolor. Para la magnitud de esa operación, no se preparó la logística
apropiada, no se estudió el terreno ni se previó la consecuencia. Un compañero
de la zona, que vio los cuerpos de los cadáveres, asegura que los muertos
tenían impacto de balas propios de francotiradores. Los seis comandantes de
escuadra no eran conocedores de la zona y la guerrilla los emboscó y los
asesinó a mansalva. La operación era de envolvimiento, pero los militares no
alcanzaron a ver nada, porque apenas se aproximaban fueron emboscados, solo
vieron cuando los cuerpos cayeron; nunca pudieron avanzar. Tuvieron que
replegarse”.
“A eso se le agrega que varios militares
en la zona eran informantes de alias Ferley y alias Arturo. El general Vera
Cumare nunca pretendió hacer una operación así siendo comandante de la brigada
en la zona. Nadie explica por qué el personal que entró a la zona para atacar
el campamento de alias Ferley era de infantería, en lugar del de artillería y
los tanquistas; los tanques fueron utilizados como conos de tránsito para los
ejes de carretera. Desde El Nula la tropa se movilizó hasta La Victoria, a más
de una hora, donde está el campamento de alias Ferley”.
Ante la pregunta de por qué ir desde El Nula a La Victoria, en lugar de ir desde Guasdualito que está más cerca, responde el coronel “lo que sucede es que la operación contempló que el personal militar se trasladó desde el aeropuerto del Táchira y la noche anterior había pernoctado en el 921 Batallón de Caribes “G/D. Manuel Cedeño del Fuerte Yaruro.
El coronel que conversó con Infobae recuerda que, “como respuesta a lo sucedido en abril y marzo, en el municipio Páez del estado Apure, el Ministro de la Defensa anunció una ofensiva ‘porque eso no se quedaría así’ según dijo, pero se está volviendo una burla. Se hizo una acción para detener a muchos de los involucrados en esos grupos de la guerrilla y a otros que son colaboradores, pero han ido soltando a los que pueden pagar, aunque estén tan comprometidos como La Patrona”. (Sebastiana Sin Secretos: Funcionarios militares y de Inteligencia detuvieron a dueños y empleados de fincas en Apure: los acusan de colaborar con las FARC)
Asegura que es vox populi el control de las FARC del
sector La Macanilla. “Ahí capturaron a Álvaro
Denis Santander Quintero “Alvarito”, quien desde hace muchos años tiene
estrecho contacto con el Décimo Frente de las FARC. Alvarito vive en Puerto
Carreño, capital del Departamento del Vichada, en la frontera con Puerto Páez,
Venezuela. Les maneja fincas y negocios a muchos mandos de las FARC en el
Capanaparo venezolano. Fue raro que pasara a La Macanilla donde la Dirección General de Contrainteligencia
Militar (Dgcim) lo detuvo y después detienen a su mujer y a su sobrina”.
La Macanilla, es el lugar donde siempre había existido
un campamento muy amplio de las FARC, usado como centro de acopio de los
carteles mexicanos y colombianos, donde se veía con frecuencia a personas de
Centroamérica y EEUU.
“A alias Alvarito lo enviaron a la cárcel 26 de julio
en San Juan de Los Morros, estado Guárico. Ahora el Juez Militar 21 de Control,
Teniente de Navío José Soto Ortega ordena ‘su libertad plena e inmediata’, después
de enviar ‘un saludo bolivariano, revolucionario, antiimperialista y
profundamente chavista’. Le guardó las imputaciones que le habían hecho por:
ultraje a la Fuerza Armada, sustracción de efectos pertenecientes a la FANB,
Rebelión y Traición a la Patria”.
“Ese juez Soto Ortega ordena que alias Alvarito se
presente cada 30 días, prohibición de salir sin autorización del país o de la
localidad en la que vive. Tamaño descaro. Alvarito no vive en territorio
venezolano, nadie garantiza que pase a territorio colombiano cuando quiera y lo
peor es que uno se pregunta ¿y cuando desaparecieron todos esos delitos? El
juez pretende dejar en libertad a un hombre ampliamente reconocido en la zona
de tener relaciones con las FARC”.
Otro que fue liberado fue Henry Santana alias Chachi
El Cochinero. “Esas liberaciones de alias Alvarito y alias El Cochinero están
impulsadas por el jefe de la ZODI Guárico, GD Nayade
Solovenly Lockiby Belmontes”.
Hace casi un mes liberaron a 11 de los más de 100
capturados. A varios de los que detuvieron en Elorza y a otros que se
encontraban detenidos desde lo ocurrido en La Victoria de Páez, los han ido
trasladando hacia la cárcel en Guasdualito y los juicios los pasan del Tribunal
Militar a tribunales ordinarios.