Fue el 22 de octubre de 2002 cuando un grupo de militares activos de alta graduación se pronunció en la Plaza Francia
Sebastiana Barráez/ martes 25 de octubre 2022
@SebastianaB
Tomado de Infobae
La tarima de Altamira permaneció bastante tiempo
llena de uniformados de diversos componentes
Fue hace
20 años, el 22 de octubre de 2002, cuando un grupo de militares activos de alta
graduación, se pronunciaron, en acto de resistencia en la Plaza Francia ubicada
en Altamira, Caracas. “En este vigésimo aniversario es mandatorio, conmemorar
los hechos trágicos generados por el régimen, al torturar y asesinar a
quienes de buena fe, manifestaban su desobediencia. A ellos y sus familiares,
nuestros tributos y gran reconocimiento por haber sufrido tan inesperada
tragedia”.
Así lo
refiere el Contralmirante Daniel Lino José Comisso Urdaneta, uno de los actores
principales del histórico hecho, que llevó a un importante número de generales
y almirantes a pronunciarse en Plaza de Altamira con el fin de “dar continuidad
al mandato del soberano que había solicitado la renuncia de Hugo Chávez, el
11 de abril 2002, seguido de otra gran manifestación el 10 de octubre; reforzado
con un paro cívico nacional; y en pleno conocimiento del hecho de que la
dirigencia política, a pesar de ello, había decidido cesar las protestas
hasta febrero 2003, para iniciar las diligencias del referendo revocatorio,
desoyendo nuestras recomendaciones de continuar con la lucha en las calles”.
“El 06 de
diciembre 2002, un sicario vinculado a Freddy Bernal, irrumpió en la plaza
disparando y asesinando a tres personas: Keyla Guerra, Josefina Inciarte y Jaime
Giraud, e hiriendo a otras 28. El 16 de febrero 2003, fueron hallados, en la
carretera Cupo- Araira en la hacienda Palo Gacho, estado Miranda, los cuerpos
de los soldados; Darwin Arguello, Ángel Salas y Félix Pinto, y la ciudadana Zaida
Peraza, quien frecuentaba la plaza, todos con manos y pies atados, signos de
tortura y tiros de escopeta: el régimen intentó inculpar a los militares de
Altamira, pero no logró imponer su engaño. También fueron asesinados por el
régimen: Maritza Ron, Germán Delgado, Rodolfo González y Efrén Velázquez (militar de la plaza). A
todos ellos, rendimos nuestro tributo y oraciones por sus almas, ahora y por
siempre”.
En la foto se aprecia al contralmirante Comisso mirando a la cámara
junto al general Pedro Pereira de la Aviación
“Hoy,
verificamos de manera irrefutable como, aquel incipiente régimen autoritario y
deslegitimado del 2002, se ha convertido en un Grupo Delincuencial Organizado
Transnacional, fortaleciendo y consolidando, sin freno, su nivel y capacidad de
ocasionar; desgracia, destrucción y abandono, a un país y a su pueblo”.
Comisso
Urdaneta propuso, que en el vigésimo aniversario, se recuerde el
transcendental suceso. “Recordaremos el pronunciamiento transmitido por varios
medios de comunicación, el cual sigue vigente y se ratifica por si solo, ante
la catastrófica destrucción de la nación y el daño antropológico causado a
los ciudadanos que hoy subsistimos tanto allá adentro, como en el exilio,
siendo objeto de las dádivas, de estados amigos, que a bien quieran
ofrecernos. Eternas gracias a ellos”.
Dice que
desde el momento en que se hizo público el Pronunciamiento, “gracias a las
coordinaciones del GD(GN) Felipe Rodríguez Ramírez y del ciudadano Orlando
Urdaneta, entre otros, se materializó el fruto de una coordinación cívico
militar, y se comenzó a gestar y a forjar una nueva forma de relación entre
los militares que nos pronunciamos y los ciudadanos que allí acudían. Nos
dábamos apoyo y fuerzas, mutuamente, para continuar con la lucha”.
El contralmirante Comisso Urdaneta fue uno
de los protagonistas principales de Plaza Altamira
“Se negoció”
Recuerda que el 26 de
octubre 2002, “se celebró un Cabildo Abierto Extraordinario, convocado por el
entonces Alcalde Metropolitano de Caracas, Alfredo Peña (f), en el cual se
declaró y decretó, al espacio delimitado por la Plaza Francia de Altamira,
como “Zona Liberada” del régimen, en la cual regían el desconocimiento y la
desobediencia constitucionales, hacia el tirano violador de la Constitución y
su régimen”.
“En
noviembre 2002, se dio la primera mesa de negociación entre el régimen y la
oposición, con intermediación del secretario general de la OEA y del Centro
Carter; en las primeras tres sesiones fueron incluidos dos militares de
Altamira; el GD (EJ) Enrique Medina Gómez y el VA Héctor Ramírez Pérez,
luego excluidos definitivamente. Eso facilitó que la agenda de la mesa no se
centrara en la solicitud de renuncia, sino en una negociación para la
celebración de un referendo revocatorio”.
Joao de Gouveia disparó asesinando a varias personas
que hacían vigilia en Plaza Altamira en apoyo a los militares
Está
convencido Comisso que “la plaza Altamira se consolidó como el centro motor de
recolección de firmas”, además de haber crecido hacia Valencia y se proyectaba
hacia Maracaibo y otras ciudades, generando fuerza en las asambleas de
ciudadanos en Caracas, “razón por la cual la Plaza Altamira “debía ser
desmontada” antes de la celebración de dicho evento electoral, cosa que
ocurrió. Los resultados ya los sabemos”.
El
homenaje
Reveló
que son miles de centenares de personas quienes frecuentaron Plaza de Altamira,
que dejaron sus testimonios plasmados de su puño y letra en los libros de
visitantes. “Por su resguardo, a su debido tiempo serán publicados, tanto los
testimonios como los nombres de las personas que nos honraron con su
participación diaria y cercana, fortaleciendo el espíritu de resistencia que
se ejercía en esa zona liberada”.
A Maritza Ron la asesinaron de un disparo
“Rendimos
homenaje a quienes han fallecido, durante y en fecha posterior al término de
las actividades en la plaza y que no tendrán la dicha de compartir la Nueva
Venezuela, al menos en el plano terrenal: Magally Ríos, Lorena Moreno Leoni, Carmen
Arenillas, Sandra Sánchez Parra, Omar Contreras, Carlos Bastidas, Maruja Beracasa,
señor Penzo (señor mayor de guayabera blanca), Melchor Abol (op), Vasco Da Costa
(preso y torturado), Manuel Rafael Rivero y su esposa Isabel Palacios de Rivero”.
Rinde
especial reconocimiento “a nuestras esposas e hijos, quienes nos acompañaron
en las mismas condiciones y circunstancias, asumiendo los riesgos que allí se
podían presentar. Hoy todas nuestras familias sufren las consecuencias de tal
disposición y sin embargo no se genera ningún signo de arrepentimiento, por
el contrario, todos podemos vernos las caras de frente y bien en alto. Igual
agradecimiento a nuestras madres, hermanos y amigos, que acudían a la plaza
cuando podían y a pesar de los riesgos”.
Civiles armados contra los manifestantes en Altamira (EFE)
Los
militares
El
contralmirante Comisso recuerda a quienes se pronunciaron en la Plaza Francia
de Altamira.
Ejército:
Generales: Enrique Medina Gómez, Félix Ruiz Guzmán, Henry Lugo Peña, Néstor González
González, Rigoberto Martínez Vidal y René Sericia García.
Coroneles: Carlos González Caraballo, Félix Sánchez Sivira, Gustavo
Díaz Vivas, John Pilieri Carmona, Alexander Rafo Navarro, Domingo Santana
Gómez, Germán Morillo, Sarub Rojas, Richard Azuarte y Ricardo Bouza Baduell.
Coroneles: Carlos González Caraballo, Félix Sánchez Sivira, Gustavo
Díaz Vivas, John Pilieri Carmona, Alexander Rafo Navarro, Domingo Santana
Gómez, Germán Morillo, Sarub Rojas, Richard Azuarte y Ricardo Bouza Baduell.
Tenientes
coroneles: Ovidio Rodríguez Rodríguez.
Mayores: José Salas La Riva y Ulice Hernández Ferrer.
Capitanes:
Wismerk Martínez Medina, Carlos Blondell, Otto Gebauer Morales, Alfredo
Salazar Bohórquez y Ricardo Salazar Bohórquez.
Tenientes:
Alex Aguirre Sánchez y Subteniente Gilberto Landaeta Vielma.
Sub
Oficiales: César Medina Gómez.
Sargentos:
José Velasco Efrén, Richard Barón Reyes, Luis Sánchez, Elvis González
Reyes y Guevara.
Soldados:
Darwin Istúriz Arguello (f), William José Rodríguez Muñoz,
Jairo Sarmiento Briceño, Franklin Ortiz Figuera y Jorge Luis Solano Peche.
Los entonces presidente de Fedecámaras y la CTV
con el general Medina
Armada y Marina
Mercante
Almirantes: Héctor Ramírez Pérez, Daniel Comisso Urdaneta, Edgar Morillo
González y Oscar Betancourt Patiño.
Capitanes
de Altura: José Ballaben Bueno, Luis Espín Ramos, José
Blandín Villegas, José Blanco Penin, Omar Fumero Pino, Enrique Carballo
Rodríguez, Enrique Colomes Pedro’s, David Salazar, Iván Cabrera, Gustavo
Naranjo La Grave y Leonardo Silva Prince.
Capitán
de Corbeta: Miguel Yilales Arteaga.
Tenientes
de Navío: Rodríguez Rivera Carlos;Ríos Rojas
Antonio;Clement Blanco Henry; Solórzano Guerrero Isaac; y Villalobos Franchi
Juan.
Sargentos: Guevara Torres Ramón; y Torrealba Jiménez Máximo.
Marineros: Salas Edwin; Ángel Salas Lozano (f); Sifontes Pedro;
Arrivillaga Itriago; y Carmona.
El general (GN) Edgar Bolívar Ramírez en una de sus participaciones
frente a la multitud en la plaza
Aviación:
Generales: Pedro Pereira Olivares, Antonio Narváez
Chacón y Clinio Rodríguez Obelmejías.
Coroneles:
Marcos Salas Vivas y Antonio Ortega Bruces.
Mayores: Díaz Castillo y Hersomino Pérez.
Sargentos:
Pinto Heras Félix (f); y Pinto Miguel.
Guardia Nacional
Generales:
Carlos Alfonso Martínez, Felipe Rodríguez Ramírez, Edgar
Bolívar Ramírez, Edgar Méndez Casanova, Oscar José Márquez (f), Ángel Sánchez
Velasco; Díaz Vega Régulo (f); Añez Núñez Eugenio José, Dávila Navas
Augusto y Rodríguez Infante José.
Coroneles:
Carlos Hernández Martínez, Pérez Pernalete Gerardo, Contreras Rangel
Jael, Trujillo Contreras Carlos, Martínez Griman Otilio, Suárez Viloria
Milton, Arias Pernía Eduardo, Alfonso Cedeño Ricardo, Ortiz Zambrano Héctor,
Grateron Mendoza Félix, Briceño Domínguez Oscar, Torres Rodríguez Edgar,
Martínez Rodríguez Jorge, Silva Hernández Oscar, Hernández Paz Alexander,
Semprun Valecillos Antonio, Cordero Rosales Teolindo y Escalante Ramírez
Henry.
Tenientes
Coroneles: Prieto Morales Miguel.
Mayores: José Wahab Coronado, Manuel Ramírez y Jesús Fuentes Marval.
Capitanes:
Flores Rivero Pedro, Rojas López Iván y Carrero Araujo Leonardo.
Tenientes:
José Colina Pulido, Luis Delgado Michelena, Samir Soler Polanco, Germán
Valera López y Mora Juvenal.
Suboficiales:
Belisario Sojo.
Sargentos:
Juvenal Mora Pineda, Simón Vargas Duarte.
Soldados:
Seudiel Medina Álvarez, Alberto Galarraga, Ramón Mirabal Dixon, José
Luis Silva, César Núñez Pirela y Miguel Pinto Vera.
El general (Ej) Néstor González uno de los oficiales
más emblemáticos de Plaza Altamira
Qué decía
el manifiesto
El
llamado “Pronunciamiento de Militares Democrático” destacaba que “en Venezuela
se ha monopolizado el Estado, secuestrando las instituciones, violando el
estado de derecho, desconociendo el poder judicial. El Gobierno del presidente
Hugo Chávez ha hostigado y perseguido a la iglesia, a las fuerzas sindicales,
a los medios de comunicación social, a las organizaciones cívicas, al
empresariado y a los partidos políticos”.
En
función de eso los firmantes del documento dijeron, ese 22 de octubre, que el
pueblo no puede obedecer a un gobierno “que ha cometido crímenes de lesa
humanidad, como el monstruoso caso de Puente Llaguno, aun no resuelto; que ha
desencadenado la más brutal corrupción de la cual conocemos sólo los más
sonados casos, como el del FIEM, el FUS. El Plan Bolívar 2000 y tantos otros en
ministerios y gobernaciones adictas al régimen; que ha triplicado la pobreza,
liquidando
programas sociales, prometiendo sin cumplir”.Agregando,
entre otras cosas, que “ha allanado hogares, de manera injustificada. Ha
penetrado y politizado a la Fuerza Armada, buscando su liquidación
institucional para sustituirla por fuerzas paramilitares, como los Círculos
Bolivarianos. Ha atropellado a periodistas y dueños de medios con su discurso
y con atentados directo a equipos e instalaciones físicas, llegando al
asesinato de comunicadores sociales. Ha atentado contra el derecho de propiedad”.
Así mismo
“ha amenazado con expropiar infraestructuras físicas de industrias y comercios
que no se adhieren a la revolución Castro comunista. Ha utilizado el
abominable sicariato político. Que establece fuerte lazos de compromiso con
las FARC, el Castro- Comunismo, Libia e Irak, entre otros”.
Destacando
que el entonces gobierno, a tarvés del presidente Hugo Chávez “ha sembrado, de
manera programada y perseverante el odio entre los venezolanos, que ha
pretendido sembrar diferencias raciales en un pueblo mestizo e igualitario a
través de un discurso descalificador, prepotente, grosero y autoritario”.
En razón
de esas, y otras razones, invocaron el artículo 350 de la Constitución,
reiteraron, que “las FAN son democráticas y repudian un golpe de estado o un
autogolpe”, anunciando que “nos declaramos en desobediencia legítima y
desconocemos al régimen actual. Hacemos un llamado a todos los integrantes de
nuestra Armada Nacional a que nos acompañen en esta misión a todo lo ancho y
largo de nuestra patria y, esencialmente, a aquellos compañeros de armas que
están en la jurisdicción del área metropolitana de Caracas, que se presenten
en la plaza Altamira la cual declaramos territorio liberado de la FAN
institucional”, agregando que “convocamos a la sociedad civil y al pueblo
general para que se declare en desobediencia civil”, se plasmó en el documento
de los oficiales.
A 20 años de la resistencia en Plaza Altamira, un contralmirante recordó por qué enfrentaron a Hugo Chávez - Infobae