El chavismo designó a Hannover Esteban Guerrero Mijares como Segundo Comandante y Jefe del Estado Mayor de la 35 Brigada de Policía Militar. Ocupaba un rol clave en la estructura represiva cuando fue asesinado el capitán Acosta Arévalo
Sebastiana Barráez/ 21 de agosto 2020
@SebastianaB
Con el número de Resolución 037274 del 18 de agosto
2020, el Ministro de la Defensa GJ Vladimir Padrino López, por disposición de
Nicolás Maduros Moros designa al coronel (Ej) Hannover Esteban Guerrero Mijares
como Segundo Comandante y Jefe del Estado Mayor de lo que fue la prestigiosa y
reconocida 35 Brigada de Policía Militar “Libertador José de San Martín”, con
sede en el Fuerte Tiuna. Ese coronel ha sido denunciado por numerosos
familiares y presos como responsable de la ejecución de la violación de
derechos humanos, torturas y muertos mientras fue Jefe de Investigaciones en la
DGCIM.
Solo con encubrimiento ha logrado mantenerse en la
Fuerza Armada. Un general confiesa que “siendo teniente, Guerrero Hannover
ingresó a la habitación de las soldados femeninas e intentó propasarse, pero
ellas reaccionaron y lo sacaron a golpes del dormitorio. Eso ocurrió en el 351
Batallón José Miguel Lanza. El entonces comandante, de apellido Segovia, lo
perdonó para evitar el escándalo. Solo por esa acción ese teniente debió ser
severamente castigado”.
No es la primera vez que este oficial del Ejército
está en Policía Militar. En la época en que era capitán, fue sacado de esa
unidad por varios arrestos simples por errores cometidos en el Parque de Armas,
donde se dejó robar un armamento, lo cual debió ser motivo suficiente para que
su carrera tuviera serios tropiezos en sus ascensos.
Recibió la benevolencia de un oficial que lo envió a otra unidad Militar. Años después, con el grado militar de Mayor fue nombrado segundo comandante del 351 Batallón José Miguel Lanza, el mismo aquel donde se metió a los dormitorios de las femeninas, repitió la hazaña, al ingresar a la de una femenina.
Y asombrosamente después, siendo teniente coronel,
comandó el 352
Batallón de Policía Militar Capitán Abdón Calderón en Fuerte Tiuna, en las
mismas instalaciones de la Brigada.
Como coronel Hannover Guerrero fue el Director de
Investigaciones de la Dirección General de Contrainteligencia Militar, que
dirige el MG Iván Hernández Dala, hasta el 21 de agosto cuando lo sacan de la
sede central y fue nombrado para la Región Capital de DGCIM, según instrucción
Nr. 035/14AGO19.
En ese cargo, Hannover reemplaza a su también
antecesor en la DGCIM, al entonces coronel del Ejército Rafael Antonio Franco
Quintero, a quien Nicolás Maduro asciende en julio 2002, a General del Ejército
venezolano, de número 14. Franco y Hannover crearon una escuela de tortura,
fábrica de expedientes y testigos estrellas, en concordancia con tribunales
militares y de terrorismo, así como del Servicio Nacional de Medicina y
Ciencias Forenses (Senamecf). Eso se refleja en los relatos de familiares y
víctimas.
Si fue sombría la etapa de Franco Quintero al frente
de Investigaciones en la Dirección General de Contrainteligencia Militar
(DGCIM), la más terrible ha sido la del coronel del Ejército Hannover Esteban
Guerrero Mijares, quien egresó de la promoción 1996 “General de Brigada José
Florencio Jiménez”. Hoy ese cargo está en manos del general de brigada Carlos
Enrique Terán Hurtado, quien también ha cometido violación de derechos humanos
contra detenidos en esos inmundos sótanos y familiares.
Aunque al inicio de la llegada de Hannover Guerrero
las condiciones de los detenidos en la DGCIM mejoraron bastante, poco después
aplicó mayor brutalidad que su antecesor. Es por eso que durante la época en
que fue jefe de Investigaciones, ocurrieron la tortura de varios militares y
civiles, el levantamiento de actas de investigación amañadas con uso de
testigos que cedían a presiones para que declararan contra aquellos que el
Gobierno tiene interés en mantener presos y la muerte de varios detenidos.
Los emblemáticos fallecidos en la etapa de Hannover:
Nelson Martínez: el 30 de noviembre 2017 fue detenido quien fuera presidente de CITGO,
Ministro de Petróleo y presidente de la estatal Petróleos de Venezuela. Un año
después empezó a presentar problemas de salud por una válvula coronaria vencida, pero no
le dieron asistencia médica a tiempo. Cuando fue sacado para el Hospital
Militar de Caracas, con un cuadro febril que algunos custodios consideraron
alarmantes, era demasiado tarde con sepsis que lo llevó a la muerte
unos días después.
Capitán de Corbeta Rafael Acosta Arévalo: el 21 de junio 2019 fue secuestrado por funcionarios
de la DGCIM, del estacionamiento de un centro comercial. Cinco días después el
ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, mencionó a través de la televisión
que Acosta estaba señalado de planificar magnicidio y actos terroristas. El
presidente de la Asamblea Constituyente y número 2 del Gobierno, dijo en su
programa de televisión, cuando se refirió a los detenidos el 21 de junio, entre
esos al capitán de corbeta, que “todos están detenidos a buen resguardo
declarando”. El 28 de junio es presentado al tribunal Tercero de Control Militar, al cual
Acosta es llevado en silla de ruedas, con signos evidentes de tortura y
pidiendo auxilio ante el juez capitán (GNB) Maikel Amezquita Pion,
quien se limitó a enviarlo al hospitalito de Fuerte Tiuna, donde pocas horas
después el oficial falleció.
La
más asombrosa impunidad ha caído sobre esos casos. Ni siquiera ha habido
contundencia para lograr que se investiguen los hechos.
“Retardo Procesal Niega la Justicia a Trabajadores Petroleros”
ResponderBorrar Familiares, amigos y compañeros de los Trabajadores Petroleros detenidos en septiembre de 2017, por estar presuntamente atentando contra los acuerdos económicos celebrados entre Rusia y Venezuela (Caso Petrozamora), tal y como lo señala el acta policial, hacemos un llamado a la sensatez al Juez de la causa, para que se avoque a celebrar la audiencia preliminar, que ha diferido estos últimos tres (3) años. Cabe destacar que nuestros familiares son personas con promedio de edad de más de 50 años, con cuadros clínicos y patológicos (Hipertensión Arterial, Cardiópatas, entre otras), que los hace pertenecer a la población vulnerable del COVID-19.
Sr. Presidente Nicolás Maduro, en aras de fortalecer nuestro sistema de Administración de Justicia, respetuosamente le solicitamos su intervención como Jefe de Estado, para que conmine a los Jueces a Celebrar las audiencias respectivas, y poder acceder a la merecida justicia.
Nuestros familiares fueron imputados por el ejercicio de supuestos cargos que nunca ocuparon en la industria petrolera; y por responsabilidades que no eran inherentes a los cargos que sí ocupaban. Consideramos injusto, que, por el hecho de no tener pruebas para judicializar a nuestros familiares, los mantengan tras las rejas; incluyendo a uno que ni siquiera fue acusado en los 45 días de investigación, lo que da muestra de una Flagrante Violencia al Derecho, digno de ser revisado.
Solicitamos además que los jueces se pronuncien sobre el Decaimiento de la Privativa de Libertad, interpuesto de conformidad con la Ley hace un año.
El silencio y cualquier tipo de acciones evasivas, Cercenan la Justicia y Condenan Tácitamente al inocente.