Marlyn Egleeth Velasco Márquez dijo que el rapto y posterior liberación de Antonella Guadalupe Maldonado Roa puede estar vinculado a los negocios en Venezuela del socio de un conocido narcotraficante colombiano
Sebastiana Barráez/ lunes 01 de febrero 2021
@SebastianaB
Tomado de Infobae
“No se trata de la tía que envidiaba a su sobrina o a su hermana y la vendió. No señores, aquí estamos hablando de la hija del señor José Antonio Maldonado, de quien tenemos infinidad de datos, pero a quien no voy a utilizar para tapar o justificar un acto como el que sucedió con la niña. Él fue socio, hasta hace dos años, de José Hernández, alias El Ñeñe Hernández, un narcotraficante de alto nivel, uno de los más grandes narcos de Colombia”, dice Marlyn Egleeth Velasco Márquez, mencionada como partícipe en el secuestro de la niña Antonella Guadalupe Maldonado Roa en la frontera venezolana, quien permaneció 14 días en cautiverio.
El
rapto de la niña, ocurrido el 01 de enero en el
barrio Pérez de Tolosa, San Juan de Colón,
municipio Ayacucho, Táchira sucede cuando a un tío le disparan y le
arrebatan a la nena de los brazos. “Soy Marlyn, la persona que el señor Freddy
Bernal acusó, hace unos días, del secuestro de la niña de cuatro años. Me
etiqueta con el alias La Paraca, que nunca han utilizado para referirse a mí,
me vincula con el grupo paramilitar Los Rastrojos, el que casualmente se
encuentra dando la pelea contra su guerrilla, señor Freddy Bernal, en Puerto
Santander”, dice la pareja sentimental de la tía de la pequeña secuestrada.
Explica
que Ñeñe Hernández, “quien era de Valledupar (Colombia), es asesinado en Brasil
en el año 2019; él utilizaba la misma fachada de José Antonio Maldonado, como
empresario y ganadero, ante la alta sociedad”, y asegura que alias Ñeñe también
era socio de Quico, “una de las personas encargadas del blanqueamiento de los
capitales del grupo paramilitar Los Urabeños y el Clan del Golfo”.
Insiste
en que el caso es profundo. “Lincon, el funcionario del Cicpc, a quien no
nombran y no aparece en ninguna noticia, aunque estuvo con nosotros desde el
principio hasta el final de esto, llegando al punto de que, estando en Cúcuta, quiere
extorsionarme y fue cuando corté comunicaciones con ellos”.
“El
18 de enero ellos se fueron a celebrar el cumpleaños de Elvert Gómez en
Cartagena. Pueden pedir revisión de cámaras. Las cosas se deben verificar y
comprobar”. Critica que solo hay un testimonio; “están limitados a los que
Elvert Gómez ha querido decir, a lo que él ha dicho y a toda la farsa que
Elvert Gómez ha querido crear, algunas movidas por ambición, otras por el
absurdo que su pareja sentimental le pintaba y otras por rabia e impotencia”.
Dirigiéndose
“a la familia de Rosmary Roa, quien fue mi pareja sentimental, hasta hace más
de un año, les digo, a la madre, al padre, a sus tíos, a su abuelita a quien
tanto ella ama, a su hija Valentina y a ti Ros, a quien tuve que despedir
dejándola destrozada, no crean en esta bajeza, esto es algo mucho más profundo
que una tía resentida o una hermana envidiosa. Rosmary no tiene nada que ver en
esto”.
“Señores,
destruyeron la vida de una persona inocente. Si Rosmary tuviese algún tipo de
responsabilidad y yo tuviera conciencia de eso, no la taparía; ella está
destruida, así al menos la dejé”.
Asegura
que Talía Durán es inocente “y se encuentra detenida, siendo madre de un niño,
que está desprotegido, porque su padre Darwin Becerra también es injustamente
solicitado, sin que haya tenido ninguna intervención directa en esto, siempre
ha ejercido sus funciones como chofer, como mandadero sin profundizar en qué
esté o no esté yo”.
“Yo
no soy una santa, no soy la super héroe que se responsabilizó de la mitad del
pago de la liberación de la niña, asumiendo otro tipo de responsabilidades para
que ella saliera; también soy una persona que ha tenido sus modos en la vida
para adquirir dinero, no soy una santa, lo asumo, pero en esta oportunidad
estoy siendo mal nombrada”, asegura la mujer que hace unos días cumplió 42
años.
Cambio de vivienda y manos
Marlyn Velasco, dirigiéndose a Bernal Rosales, lo
refuta. “Ustedes dijeron que habían rescatado a la niña gracias a un arduo
movimiento policial, a la gran tecnología telefónica, al rastreo de llamadas y
a no sé cuántos hasta dar con el cautiverio de la niña en Tucapé (municipio
Cárdenas), donde fueron aprehendidas dos personas, entre ellas Abimael Becerra
(Abimael
José Labrador Becerra), pero Abimael fue realmente detenido en el momento
en que se dirige a las oficinas del CONAS (Comando Antiextorsión) para saber de
su madre, a quien se habían llevado de su casa y ustedes lo detienen”, dice
Velasco.
“Hace unos días cambian la versión cuando el señor
Elvert Gómez (Elvert Daniel Gómez Gómez) decide entregarse y es
el único detenido que ustedes tienen hasta ahora vinculado con el caso, sea en
la etapa que sea”, porque según ella el secuestro de la niña se divide en
varias etapas.
“Así como la niña fue cambiada de vivienda por más de
cuatro oportunidades, según tengo entendido, también fue cambiada de manos para
llegar a la liberación y a la garantía de su integridad física”.
En cuanto a su participación en el secuestro dice que
no es en la parte relacionada al secuestro “pero que trataré de aclarar frente
a las autoridades respectivas, aunque esto represente para mí un suicidio,
porque no soy una persona de estar escondida ni andar corriendo; lo haré en que
cuanto termine de organizar las cosas, me presentaré, aunque lo haga en un país
sin garantías y sin derechos humanos”.
Asegura que “el señor Elvert Gómez tiene una relación
sentimental con el caballero Lincon del Cicpc (Cuerpo de Investigaciones
Científicas Penales y Criminalísticas) de San Cristóbal, Táchira; ellos se
dirigen a mi casa, entre el 16 y 17 de enero”, que según ella se puede
verificar, con la Fiscalía de Cúcuta, a través de las cámaras del Condominio
Bonaire, torre 4, donde estaba su residencia.
Considera absurdo que alguien que probablemente estaba
preso desde antes que la niña naciera, la estaba vendiendo. “Es Elvert Gómez,
quien era mi amigo si se puede llamar así, y quien tenía diferencias con la
señorita Rosmary Roa, mi expareja sentimental, quien me plantea que utilicemos
el nombre de ella, a lo que me niego, con mucha rabia incluso”.
https://www.infobae.com/america/venezuela/2021/02/01/hablo-una-de-las-mujeres-involucradas-en-el-secuestro-de-una-nina-en-la-frontera-venezolana-no-soy-una-santa-pero-estoy-siendo-mal-nombrada/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario